Nuestra comunidad de estudiantes, el equipo interdisciplinario y el modelo de trabajo de nuestra institución promueven espacios y facilitan herramientas que influyen positivamente en la salud mental de la población de Samaná, así como en el fortalecimiento de los valores de la sociedad y del grupo familiar para, así mismo, crear relaciones sociales sólidas, basadas en el respeto, el amor, la paz y la felicidad.

Como escuela verde que se rige bajo un modelo auto sostenible, creamos consciencia sobre el cuidado del medio ambiente en cada uno de nuestros alumnos y sobre la responsabilidad que recae sobre cada uno como habitante de La Tierra, el hogar de todos los seres humanos. Formamos nuevas generaciones que llevan este importante mensaje a sus hogares primarios y a la sociedad.

Toda la infraestructura de nuestro plantel está diseñada con materiales nobles como el bambú y los ambientes de aprendizaje son concebidos como estancias al aire libre en contacto con la naturaleza circundante. Los estudiantes aprenden a trabajar la tierra haciendo sus propios cultivos de diferentes alimentos para el consumo dentro en el colegio, lo que refuerza nuestro modelo de escuela auto sostenible.

En nuestras instalaciones usamos paneles solares para aprovechar la luz solar  y obtener la energía eléctrica necesaria para la institución y para la comunidad vecina.

Nuestra institución educativa genera empleos directos e indirectos en diversas disciplinas y estas personas forman parte activa de nuestra comunidad educativa (personal docente, ingenieros ambientales, arquitectos, psicólogos, orientadores espirituales, nutricionistas, enfermeras, administradores, personal de cocina, aseo y seguridad).

Nuestra revolución educativa no solo impacta a la comunidad de estudiantes de nuestra institución, a sus familiares y entorno, sino que impacta a toda la comunidad de Samaná y su modelo educativo. En un futuro cercano aspiramos lograr un impacto todavía mayor en el país, gracias a un modelo educativo holístico que puede ser tomado como ejemplo para reducir la deserción escolar. Nuestros espacios de aprendizaje dinámico, en los que el alumno es capaz de encontrar su esencia y pasión genuinas, así como la autonomía para construir su propio camino de conocimiento, propósito y felicidad, conforman el modelo de educación consciente que queremos para República Dominicana.